1.24.2011

Tarta para Antonia

Buenas a todos!

Voy a intentar hacer una entrada semanal, aunque no os lo garantizo, porque normalmente me pongo a cocinar y me acuerdo de las fotos después de... Incluyendo después de comérnoslo!!! Y también porque no suelo acordarme del blog, francamente! Pero a veces... si hago algo especial... A lo mejor me acuerdo de la cámara!

El pasado lunes, día 17 de enero, fue San Antonio. En Mallorca es uno de los santos más celebrados, y una muy buena amiga, demostrando que es la organización en persona, nos preparó un súper desayuno en la media hora de la que disponemos a media mañana, con sobrasada casera hecha por ella, paté hecho por ella (éste tenía un puntillo picante, no picaba, hubo uno (paréntesis dentro del paréntesis; a mi me encanta el picante, así que ése me encantó) que era para sacar fuego cual dragón de leyenda), queso, tomates, aceite, dos ensaimadas, pan de pagès, barras, .... Creo que sólo queda mencionar la bebida, porque trajo de todo, ya os digo que es la organización en persona. 

Y como es la persona mas competente que conozco y siempre está en todo y sabe hacer de todo, es difícil sorprenderla con algo, y mucho menos hacerle un regalo, porque sabe de cualquier cosa: manualidades, cocina, bricolaje, restauración, decoración, plantas,... Aquí hago especial mención a su "hospital" de orquídeas; salva cualquiera que esté a punto de morir y consigue que saquen unas flores... Y también tiene una mano con los bulbos de cualquier tipo; qué envidia!! Es una mujer realmente admirable, generosa y atenta. Hasta ha sacado casi todas las fotos de esta entrada!! 

Y se ha apresurado a enviármelas rápidamente en cuanto ha sabido que estaba con la entrada. Siempre en todo, vaya! Y mencionemos también aquí a su hija, genio de la informática, que me las ha enviado al momento. La única foto que no es suya es la de colorear la masa. Como la tarta de mi hermano, que también hizo él las fotos. Como no empiece a colgar la cámara junto a las cucharas de madera, lo llevo claro!

Bueno, a lo que íbamos; vi la foto de la tarta en alguno de los numerosos blogs que voy leyendo, y como siempre que necesitas algo, recuerdas que lo viste en... Ups, ahí aparece mi muy mala memoria! ¿Dónde había visto yo una tarta Arco Iris? Si lo único que necesito es una masa para teñir, lo más blanca posible! AYUDA! Atención, San Google al rescate! Y nos aparece la fantástica página de Martha Steward, aquí.

Mi intención no era hacer toooodas las capas diferentes, sino sólo una en lila, el color favorito de Antonia. Y como los experimentos hay que hacerlos con gaseosa, no pude ser menos. La masa, que era la primera que hacía de este tipo, no quedó todo lo bien que a mí me hubiera gustado, y el bizcocho quedó... La tarta final no estaba mal, pero... Empiezo con la traducción de los ingredientes y la explicación.

Ingredientes para una masa blanca, según la receta original (con mis variaciones entre paréntesis):

- Manteca vegetal (En América se utiliza mucho este concepto; tienen una muy buena, que consigo en la Tienda Americana en Madrid, pero como prefiero reservarla para trabajar el fondant, no es barata, y es sólo para engrasar el molde, utilizo mantequilla y un poquito de harina) 
- 3 "cups", que no tazas, de harina (la especificación se debe a que las cups americanas tienen unas medidas standard, no se trata de coger una taza de casa y probar; así que apuntad 1 cup = 240g, así que 720g. Exacto, un montón. Así que hice los cálculos según el número de claras, usé tres claras, y su equivalente en el resto, por tanto, 430 g de harina normal)
- 4 cucharaditas de levadura (otra medida standard americana; yo cogí medio sobre de levadura)
- 1/2 cucharadita de sal (yo no puse)
- 1 "cup" de mantequilla, a temperatura ambiente (240g, que en mi caso eran sólo 150g)
- 2 "cups" y 1/3 de azúcar (o sea, 430g)
- 5 claras de huevo a temperatura ambiente (yo sólo 3)
- 1 "cup" y 1/2 de leche (360ml; vale, vale, ya sé eso de que la equivalencia de ml y g sólo es con el agua, pero para el caso...)
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla (yo, sólo 1; se puede poner las dos, después explico porqué)
- 6 Colorantes (no; sólo lila)

Se mezclan los ingredientes, empezando por batir la mantequilla y el azúcar. Yo lo puse en mi KA, y fui añadiendo las claras. Se puede añadir el huevo entero, pero el amarillo de la yema no nos interesa, y en la receta original no vienen incluidas, además, así sale más light, que con todo lo demás... Añadimos la harina con la levadura, despacio, para que se vaya incorporando, y finalizamos con la esencia y la leche. Una vez bien amasado, añadimos el colorante. Si nos interesa conseguir el pastel arco iris, es mejor hacer la masa completa, con todos los ingredientes, porque hay que dividirla en distintos recipientes, en la misma medida, e ir tiñendo y horneando por separado, claro. Yo sólo quería teñir en violeta, y encima, sabiendo que cuando teñí la masa de las galletas en azul, se volvió verde. Menudo riesgo! Y quería que saliera lo mejor posible.

El color me gustó
Pero como he dicho, los experimentos, con gaseosa. Y el primer error, supongo, fue hacer los cálculos en base a lo que yo creía que necesitaba. Algo falló. A ver, quedar, quedó muy bien. A lo mejor el error no estuvo en los cálculos, sino en el bizcocho en sí. Me explico: en el original, divides la masa en crudo, la horneas en planchas individuales, y las montas. Yo hice un horneado de toooooda la masa (vale, vale, tres quintas partes) y ahí intervino el segundo error: mi horno. 

Estas navidades, uno de mis hermanos le pidió a Papa Noel que me trajera un reloj de horno, y... Valía más seguir en la ignorancia; sabía que mi horno no era para tirar cohetes, pero la verdad, a mí me valía para conseguir todo lo que necesitaba, eso sí, poniendo las cosas mil horas más que las que necesita mi madre en el suyo, y no digamos comparando con las veces que he utilizado el de mi hermano (la envidia es verde, aunque la tarta fuera lila). Y sigue sirviendo. Funciona. Calienta y cuece. Pero cuando ves que la temperatura oscila... Sí, oscila. No aumenta, sino que va cambiando. Sííííí, ya sé eso de que si abres la puerta... No, a puerta cerrada. A ratos tenía una temperatura, a ratos otra. Ya me dijo Bea, cuando hice la primera tanda de galletas para hornear, que se fundieron, al igual que la segunda, cuando me pasé a la receta que utilizo ahora, que a lo mejor, por la temperatura real de mi horno, no me había salido bien su receta; buenísima, pero no había salido bien. Por cierto, Bea, mil gracias por tu amabilidad al responderme, y más tan rápido. Total, que entre las oscilaciones, el horneado de toda la masa, y el montón de tiempo que necesité (en la receta original, se divide la masa entre seis y cada porción se hornea sólo unos quince minutos, hasta que el palillo sale limpio)...

Bueno, en un horno normal, 175º. En el mío,... 175 en el indicador, y de 200 a 150 en realidad. Y no explico cuando abrí la puerta para comprobar la cocción! Al final conseguí un bizcocho perfectamente cuajado, y ahí, el problema. La parte exterior quedó verde, tercer error, que además, sabía, pero la interior quedó muy bien, así que decidí "recortar" el pastel, para eliminar lo verde. Quedó sabroso, pero el problema de recortar fue que la masa suelta mucha miga. Cuando cubrí el bizcocho con la crema de chocolate, las migas dejaron de caer, pero fueron siguiendo el recorrido de la espátula, así que quedó irregular, como se ve en esta foto. 

Y ahí ocurrió el error número... Bueno, no sé por cual voy. Teñí el fondant de violeta, para hacer un lazo. Y como suele ocurrir, teñí poco. Es decir, calculé bien para el lazo del ramo de lirios, pero como el bizcocho fallaba, tuve que poner una tira en la base, que teñí en una segunda tanda, y, evidentemente, no utilicé suficiente colorante, pero al final, con los tres violetas, del lazo, del cordón y del relleno, y los lirios, que esos sí me gusta mucho como quedaron... Creo que el resultado final no fue malo del todo. Vaaaale, que sí, que me gusta como quedó, pero la próxima vez, vuelvo al brownie, donde el único problema al recortar son los trozos de nuez, que... Vaya, que necesito seguir con la gaseosa y probar más bizcochos base. Es que el MSC es un ladrillo. Perfecto, pero ladrillo, y es difícil conseguir la receta que aúne perfección de diseño y sabor. Lo conseguiré!!

Y como dijo uno de los comensales, siempre hago lo mismo; cada vez que cocino, tengo que encontrar las mil pegas, aunque sean una tontería. Y señalarlas! Porque los demás vieron el resultado final, lo probaron, y confirmaron que el sabor era bueno, al margen de los errores, que sólo conocía yo, y ahora os he explicado a todos. Comer algo lila fue un poco extraño para algunos, pero la combinación de la masa, apenas con sabor (por eso podemos poner más esencia, sin fraccionar), con el dulzor del fondant, quedó realmente bien. Y los lirios, como me dijo Antonia, que sabe de dónde saqué la idea, quedaron muy bien, con el amarillo casi exacto a los de verdad. Lo único no comestible eran la base y los cuatro palillos sobre los que monté las flores, que estaban clavadas al bizcocho, para dar volumen. Y la tarta... Seguiré hasta conseguir el bizcocho perfecto, pero creo que logré mi objetivo: hice una tarta para una amiga, la sorprendí con el color de la masa cuando lo cortó, estaba muy sabrosa, y las flores le encantaron. Es decir, pese a señalar mis errores y tirar piedras a mi tejado... Creo que... ¿Puedo decirlo?... Sí, lo conseguí!!



Buen provecho!

Cris y Cía

3 comentarios:

  1. Tu y tus fallos...para mi es perfecta! Ya sabes que el fondant y yo...pues como que no! Ganitas de que llegue el domingo....petons

    ResponderEliminar
  2. Tienes una sorpresita en mi blog...pasate vale?

    ResponderEliminar

Gracias por dedicarme un poco de tú tiempo.